Ir al contenido principal

El hombre alto:

La infancia está plagada de recuerdos misteriosos que desafían toda lógica y explicación. Uno de los míos es cuando, siendo muy pequeña, a menudo percibía la presencia de personas observándome de reojo mientras caminaba. En más de una ocasión, al intentar señalar a mi madre la presencia de estos espectros, estos desaparecían en un instante, sumergiéndome en un misterio inexplicable. Otro recuerdo que se grabó en mi mente ocurrió cuando tenía unos 4 años y había sido desagradable con mi abuela. Por alguna razón, me encontraba sola en casa cuando las luces comenzaron a titilar y la televisión se encendía y apagaba intermitentemente. Fue entonces cuando, al mirar hacia las escaleras, vislumbré la silueta de un hombre alto y delgado. Sin embargo, en lugar de gritar o entrar en pánico, mi instinto fue moverme con cautela hacia las llaves, deslizándome con sigilo para agarrarlas y dirigirme a la puerta. Mientras las luces se apagaban, tomé las llaves y corrí hacia la puerta principal, dejándola abierta, y escapé de mi casa a toda velocidad. Mi primer impulso fue correr hacia donde estaba mi abuela, para buscar consuelo y pedirle perdón por mi comportamiento anterior. A pesar de compartir mi experiencia con ella, nadie me creyó. Sin embargo, su perdón me alivió y me dio consuelo en medio del misterio que rodeaba aquel evento inexplicable. — Chilinorta 666
-Chilinorta 666

Comentarios

Entradas populares de este blog

La presencia del pozo

Durante la infancia, muchas personas experimentan eventos extraños que los adultos suelen descartar. Esta es la historia de Tobías, un hombre de 36 años que asegura que su experiencia es real, una memoria que lo emociona hasta las lágrimas cada vez que la relata. Cuando tenía 5 años, Tobías estaba de vacaciones con su familia en la Patagonia. Un día, empezó a deambular solo por la campiña y se topó con un pozo muy antiguo, sellado con una rejilla oxidada. La curiosidad infantil lo llevó a acercarse y rodear el pozo. Justo cuando estaba a punto de seguir su camino, escuchó una voz que parecía provenir del interior del pozo. —Hola. La voz era la de un anciano y resonaba desde las profundidades del pozo. El pequeño Tobías, abrumado por la sorpresa, se acercó más. Con miedo a que alguien estuviera atrapado, levantó la rejilla. —Hola —respondió Tobías—. ¿Cómo te llamas? —Me llamo Tobías. —Encantado de conocerte, Tobías. Qué lindo es verte. La verdad es que ya casi nunca hablo con nadie —dij...

La historia de un chico perdido en Disney

Un hombre de 35 años llamado Luis relata un evento inquietante de su infancia, ocurrido durante una visita a Disney con su familia cuando tenía 6 años. Luis se separó de su madre y se encontró perdido, deambulando solo por el vasto parque. A pesar de caminar sin rumbo durante casi una hora, no se permitió llorar. Finalmente, se sentó en un banco para esperar. Después de unos segundos, un personaje disfrazado de Goofy se le acercó lentamente. El hombre dentro del traje le preguntó: —¿Estás perdido? Luis recuerda haber respondido afirmativamente con un movimiento de cabeza. Entonces, el sujeto se agachó, levantó los brazos y, con cada mano, comenzó a quitarse lentamente la cabeza del traje. En ese momento, las cosas se tornaron extrañas. El sujeto carecía completamente de rostro. No tenía ojos, ni nariz, solo una hendidura donde debería estar la boca, la cual se estiraba en una sonrisa grotesca. A pesar de esta visión aterradora, Luis no sintió miedo. Por alguna razón inexplicable, se si...

Los enanitos de la Floresta:

La Floresta es un populoso barrio de la periferia de la ciudad, muy cercano al barrio San Agustín (incluso muchas veces a sido confundido con éste). En La Floresta se encuentra el antiguo frigorífico municipal (hoy abandonado) y muy cerca del río, donde el barrio termina, se alzan la escuela (que al momento de los hechos era la Nº 188 Obispo Dr. Bazán y Bustos) y al lado la Dirección de Limpieza Municipal (estos edificios emplazados sobre calle República de Siria). Más allá, en zona de anegadizos, el volcadero municipal de residuos se mezcla con modestas casas que dan a la zona una característica singular y especial..              A fines del año 1983 comenzó en la ciudad -como un comentario- el hecho de la visión por parte de algunos niños, de seres pequeños denominados por ellos “diablitos con cuernos y todo” (sic), algunos los vieron verdes, coincidiendo con hechos similares ocurridos en Mendoza, el Gran Buenos Aires y La Plat...